Domingo Lecuona invita en el pregón a vivir una Semana Santa íntima

El que fuera esclavo mayor del Cristo da inicio a unos actos que no se podrán celebrar en la calle.

Eldía 20.03.2021

Domingo Lecuona Fernández, esclavo mayor del Cristo de La Laguna entre 2009 y 2010, invitó a vivir esta Semana Santa 2021 desde las parroquias de La Laguna y desde la Catedral de una manera distinta, más íntima y sin procesiones a causa de la pandemia. Esto destacó el autor del pregón de este año de la Semana Santa, que recordó que entre los días más importantes se encuentra el Domingo de Ramos y el Triduo Pascual.

La parroquia matriz de Nuestra Señora de la Concepción acogió la noche del jueves la lectura del pregón de la Semana Santa de La Laguna, en un acto que fue retransmitido en directo a través de los canales oficiales del Obispado de Tenerife, según informó la cadena COPE. Además de esclavo mayor, Domingo Lecuona fue profesor de Primaria, secretario diocesano de la Adoración Nocturna Española, tesorero de la Sección de San Pascual Bailón de la Catedral y vocal de la Asociación de Amigos de la Catedral de La Laguna. El acto comenzó con una marcha procesional a cargo de la banda de música San Sebastián de Tejina, grabada previamente. Terminado el pregón, el presidente de la Junta de Hermandades y Cofradías de La Laguna hizo entrega a Dominco Lecuona de la medalla de la entidad. El acto se cerró con las intervenciones del presidente de la Junta, Miguel Ángel Martín, y del obispo de la Diócesis Nivariense, Bernardo Álvarez.

 

La forma más fácil de visitar al Cristo

El Santuario afronta la recta final de sus obras de rehabilitación con la intervención en la zona de entrada, donde se han eliminado todas las barreras arquitectónicas.

El Día 25.04.2021 FOTOS CARSTEN W. LAURITSEN

El Santuario del Cristo de La Laguna afronta la recta final de sus obras de rehabilitación y lo hace facilitando el acceso de feligreses y turistas al templo. Después de la realización de importantes mejoras arquitectónicas en toda la construcción, que no solo han servido para mejorar la seguridad de los edificios sino también para devolverle la belleza y la majestuosidad a este conjunto, los visitantes podrán ahora acceder de una manera más sencilla al templo, a través de una plaza renovada y la eliminación de barreras arquitectónicas. La ambiciosa rehabilitación del Santuario del Cristo dio comienzo en 2018 y la previsión era que estuviera concluida a final de 2020; sin embargo, la crisis sanitaria y sus consecuencias han provocado el retraso. No obstante, está previsto que la intervención total esté finalizada en junio.

Las obras realizadas, divididas en cinco fases –aunque finalmente dos de ellas se solaparon hasta quedar únicamente cuatro–, han sido financiadas por el Gobierno de Canarias, el Cabildo de Tenerife, el Ayuntamiento de La Laguna y la propia Esclavitud del Cristo. Durante estos últimos meses, los trabajos se han centrado en intervenir la edificación que albergaba la antigua zona conventual donde se encuentra el Rectorado para destinarla a nuevos usos y la rehabilitación integral de la casa de la Esclavitud. Además, se está interviniendo en la plazoleta de acceso después de que la entidad recuperara el jardín que se sitúa en uno de los laterales del patio del recinto de manos del Ejército.

A pesar de que en un principio se había planeado dotar al espacio de luminarias, iluminación monumental, mobiliario urbano y elementos informativos, los trabajos se han reducido y se mantendrá el mismo pavimento que ha existido hasta ahora, los adoquines. No obstante, el esclavo mayor de la Esclavitud, Francisco Doblas González de Aledo, explica que se ha optado por eliminar el escalón de entrada al templo, así como el travesaño de la impresionante puerta de madera. Para ello, se ha instalado un sistema de ruedas para que la puerta se puede abrir por completo y se facilite la entrada, sin ningún obstáculo.

Francisco Doblas afirma que las primeras opiniones ya se han dejado notar entre los visitantes al Santuario, que celebran que se eliminen las barreras arquitectónicas existentes hasta el momento. En toda esta intervención ha sido relevante el trabajo desempeñado por el mayordomo del Cristo, Ferrera Martín, quien ha coordinado día tras día el correcto devenir de las obras. Ha sido él una de las personas que ha coincidido en la idoneidad de eliminar la rampa de acceso al templo, dejando la entrada a una única altura. “Queríamos hacer algo más complejo, como eliminar los adoquines y poner piedra molinera pero no ha podido ser porque no hemos recibido todo el dinero que teníamos previsto, así que nos hemos centrado en eliminar la valla que antes separaba la zona de los militares de la del Santuario e integrar todo el espacio tal y como era antiguamente”, relata el esclavo mayor, quien recuerda que esta separación se levantó en la década de 1970. Además, estos días se cambian algunos de los adoquines de la plaza para garantizar la seguridad de los viandantes en esta zona.

Las fases 3, 4 y 5 del Plan Director de la rehabilitación se han encadenando en este último tramo con los trabajos que tratan de garantizar el correcto mantenimiento de estas edificaciones. Entre las dependencias que se han intervenido se encuentran las que próximamente albergarán el museo y la tienda y para ello se han establecido nuevos accesos para estos dos espacios. Durante estos meses se ha procedido a impermeabilizar las cubiertas y se han sustituido algunos de los pavimentos no originales que han pasado a ser de manera natural o de mármol.

Con todo ello, la mejora del Santuario del Cristo y sus dependencias aledañas se ha venido desarrollando desde el año 2018 y ni si quiera se ha visto afectada –al menos no demasiado– por la crisis sanitaria que vive el país en la actualidad. A todos estos trabajos se ha sumado una importante intervención en las piezas de arte que posee la Esclavitud. En este sentido, Francisco Doblas expresa que ha sido un trabajo concienzudo porque “ha habido que coordinar la salida de todas las obras de arte, realizamos un concurso para elegir a los restauradores que se encargarían de cada pieza, fiscalizamos sus salidas con un seguro en cada caso, realizamos un seguimiento de todos los trabajos y coordinamos el regreso de las piezas”, por lo que ha sido un camino largo y complicado. Se ha trabajo sobre pinturas, esculturas, textiles, documentos y variados objetos que han formado parte del patrimonio de la congregación durante años. Para llevar a cabo estos trabajos, la Esclavitud dio forma a un comité de expertos, integrado por la restauradora Silvia Díaz; el historiador Carlos Rodríguez Morales; el delegado diocesano de patrimonio Miguel Ángel Navarro, y miembros de la Esclavitud. Este grupo se ha encargado de designar las 40 piezas que se han visto beneficiadas de los trabajos de restauración. Para la elección de los profesionales se examinó cuáles son las especialidades de cada uno de ellos, para que trabajaran así de manera cómoda.

Buen resultado

Tras este largo proceso de rehabilitación, que se ha dividido en varios ámbitos, como la de garantizar la conservación de las piezas de arte, mejorar la accesibilidad y darle seguridad al recinto con la impermeabilización y la colocación de sistemas contra incendios, la Esclavitud del Cristo destaca ahora el buen resultado de la intervención final.

Esta obra abarca facetas muy diferentes: arte, accesibilidad, seguridad y conservación. Doblas asegura que “se trata de una obra histórica, un proceso que jamás se había hecho antes y que ahora permite que este Santuario pueda continuar con su actividad durante mucho tiempo”. Añade que “lo más importante es que vamos a poder dejar el edificio con la máxima seguridad para los visitantes pero también le hemos ofrecido seguridad a las edificaciones” y concluye que “evitar un incendio es prácticamente imposible pero ahora sabemos que si se produce vamos a poder salvar una gran parte del inmueble gracias a los trabajos de impermeabilización y la instalación eléctrica renovada”.

El esclavo mayor añade que las obras tendrán su broche de oro con la apertura las próximas semanas del museo en el que se mostrará buena parte de las obras que han sido restauradas a lo largo de los últimos meses. “A través de varias estancias en las que también hemos intervenido, el visitante podrá descubrir la historia vinculada a este templo”, recuerda Francisco Doblas quien añade que este recinto “era visitado por nueve de cada diez turistas que llegaban a La Laguna”. Eso era antes de la crisis sanitaria. Ahora, la Esclavitud del Cristo espera poder recuperar poco a poco la normalidad atrayendo a la gente con esta renovada imagen. Además del atractivo de la imagen del Cristo lagunero y de la majestuosidad del Santuario y su connotación religiosa, el esclavo mayor afirma que “este nuevo museo permitirá que la gente acabe el recorrido de la mejor manera posible y que conozca la historia de este lugar, que acogió a la Orden Franciscana y que tan importante ha sido como centro de religiosidad popular”.

Almeyda rinde honores al Cristo

Centenario de la promesa de la Batería de Montaña de Tenerife al Cristo de La Laguna si regresaba de la guerra de Melilla sin bajas

PERIODICO ELDIA 09/07/2021FOTOGRAFIA: ANDRÉS GUTIÉRREZ
Humberto Gonar Santa Cruz de Tenerife

El Centro de Historia y Cultura Militar de Canarias con sede en el cuartel de Almeyda acogió el pasado miércoles la presentación de los actos conmemorativos del centenario de la promesa que realizó la Batería de Montaña de Tenerife que participó en la guerra de Melilla, a raíz de las tribus de las mismas de hierro del Rif que se levantaron en armas en la que también se denomina segunda guerra de Marruecos. Aunque el inicio se remonta a 1909, fue precisamente el 14 de septiembre de 1921 cuando salió el destacamento desde Tenerife que prometió al Cristo de La Laguna escoltarlo en cada procesión si no se registraban bajas en sus filas.

Así lo explicó el coronel José María Iglesias de Useel y de Leste, antiguo director del Museo Militar de Almeyda y comisario de los actos conmemorativos, a los diferentes mandos que asistieron a la presentación de la programación de dicha efemérides, entre los que se encontraba el jefe de la Zona Militar de Canarias, el teniente general Carlos Palacios Zaforteza.

Según los datos aportados por el coronel Iglesias, desde Canarias participaron dos baterías de montaña, que salieron en septiembre, y otras tantas de Costa que partieron en diciembre, si bien los refuerzos militares aportados desde esta región se incrementaron en 1924 con sendos batallones de Infantería. En los tres envíos, los efectivos militares partieron tanto desde Tenerife como desde Gran Canaria, lo que supone que en la guerra de Melilla, o del Rif, participaron unos tres mil canarios.

En su exposición, el coronel Iglesias precisó que la orden de «saltar a África» llegó al mando de Canarias el 30 de agosto de 1921, y se hizo efectiva precisamente el 14 de septiembre de ese mismo año, cuando se procedió a embarcar después de la promesa realizada al Cristo de La Laguna.

El militar Ventura Yagüe, que cuida del Museo Histórico Militar de Canarias, en Almeyda, como ‘al niño de sus ojos’, recordó que cada año el Ejército celebra una conmemoración, como ocurrió en el pasado con el centenario de la Legión; en esta oportunidad se ha querido poner en valor la promesa realizada la Batería de Artillería al Cristo de La Laguna.

El Museo de Almeyda se convertirá de un altar de obligada visita para los amantes de la historia que quieran revivir este episodio de la historia a través de dos exposiciones que ya están muy avanzadas: una, específica sobre el batallón de montaña, a la que se sumará, en paralelo, otra que se presentará para el título de ‘Esencia de África; canarios en África’, que reunirá desde uniformes a objetos de la época. También desde el Centro de Historia y Cultura Militar de Canarias se trabaja para poder llevar a cabo una muestra fotográfica en la Casa Lercaro, en la ciudad de La Laguna.

Las dos muestras que se desarrollarán en el Museo Militar de Almeyda están previstas que abran sus puertas en septiembre, y se contempla que se traslade a Las Palmas de Gran Canaria en noviembre o diciembre próximo. En paralelo, también está prevista la celebración de un ciclo de conferencias sobre la efemérides.

El coronel Iglesias también destaca como los hitos principales de la programación conmemorativa la presentación del sello dedicado a la Batería de Montaña, acto que está previsto el 8 de septiembre, en una oportunidad única para los amantes de la filatelia. Además, el Palacio de la Capitanía Militar de Canarias será el marco de un concierto de la Banda Militar, dentro de los actos del centenario de la promesa al Cristo, al que se añade un hermanamiento entre la Esclavitud y el Regimiento de Artillería precisamente el 14 de septiembre, día grande del Crucificado lagunero, un encuentro en el que se renovará precisamente ese compromiso que hace cien años hicieron los militares por no tener bajas en sus filas en la campaña de Melilla, como así ocurrió.

A la presentación del programa de actos conmemorativos se encontraba un bisnieto del capitán Iglesias, que estuvo al frente de la Batería de Montaña que partió el 14 de septiembre de 1921 hacia África, así como el nieto y el bisnieto del teniente coronel Salvador Acha Caamaño, que dirigió otra batería. Se da la circunstancia de que el bisnieto de este mando es José Carlos Acha Domínguez, quien fuera concejal de Fiestas y luego de Cultural del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, quien, junto a su padre José Manuel Acha asistieron a la presentación tanto por el rango de consanguinidad con uno de los mandos que participó en la batalla como por su colaboración demostrada en la cesión puntual de objetos que se expondrán en la muestra que se organiza para el próximo 8 de septiembre. El propio Ventura Yagüe puso en valor el hecho de que los militares canarios participaran en diecinueve combates en el año y un mes que estuvieron, según el capitán Salvador Iglesias, en África. «Y veían como a su lado caían compañeros víctimas de los ataques, pero ninguno era de Artillería, lo que atribuyeron a la protección del Cristo de La Laguna».

Ventura Yagüe explica que la muestra incluirá desde armamento de la época a condecoraciones, unos fondos que ya están clasificados y que se mostrarán desde septiembre en dos salas, teniendo un papel fundamental la colaboración de la Asociación Amigos del Museo Histórico Militar de Canarias, con sede en Almeyda.

Homenaje a soldados canarios

Ventura Yagüe puso énfasis en que los actos del centenario de la promesa al Cristo de La Laguna también supongan enaltecer a los soldados canarios que participaron en la guerra de Melilla, «agricultores de 18 y 19 años que venían de diferentes puntos de la geografía insular, le daban una escopeta y lo mandaban al frente».

En el trabajo de documentación, Yagüe se refería al caso de Juan Rojas Morales, natural de Arico el Alto, que integró el Batallón de Expedición 64 de Infantería. Si nieta, Clara Marrero, se presentó un día en el Museo Militar y mostró una carta que tenía encuadernada en su dormitorio por la carga emotivo con el autor: su abuelo. Tras revisar el escrito, el documento incluye en forma de poema todo el recorrido que realizó desde que salió de su casa hasta que llegó a Melilla, y en el reverso de la hoja había escrito hasta la canción que entonaban los miembros del batallón. ¡Una joya!, destaca Ventura Yagüe, que precisa que, aunque no forma parte directamente de los efectivos de Artillería que partieron en 1921 –el escrito se data en 1925–, se va a incluir también en la exposición, porque forma parte de la historia de esta campaña, aprovechando la relevancia con la que el Ejército destacará la promesa al Cristo.

Para Ventura Yagüe, se trata de una oportunidad única para conocer la aportación de canarios que participación en misiones en defensa de la Patria. «Aunque anónimos, son héroes de nuestra tierra que participaron en una campaña como la guerra de Melilla y a la que ahora se les rinde tributo».

Un artillero escolta al Cristo, como ocurre desde 1921. Abajo, la familia Acha atiende las explicaciones del coronel Iglesias, comisario de los actos.

El atrio del Santuario albergará los principales actos religiosos del Cristo de La Laguna

Queda descartada la opción en la que trabajaban el Ayuntamiento y la Esclavitud para sacar la imagen a la plaza | Habrá una pantalla gigante los días 9 y 14 de septiembre

D. R. La Laguna | 07·09·21 EL DÍA

Los principales actos religiosos de las fiestas en honor del Cristo de La Laguna se celebrarán finalmente en el atrio del Real Santuario –ese espacio abierto que antecede al templo– y no en la plaza, que era la primera opción en la que trabajaban el Ayuntamiento de La Laguna y la Esclavitud del Cristo.

La decisión fue dada a conocer este martes durante la presentación del programa y cartel que ha confeccionado la conocida hermandad lagunera. Tanto la obra anunciadora como la portada del libreto de actos están protagonizadas por el óleo que preside la Sala de Juntas de la Esclavitud del Cristo, obra del abogado y exalcalde lagunero José Vicente de Buergo y Oráa.

El concejal de Fiestas, Badel Albelo (PSOE), aseguró que la imposibilidad de desarrollar estos actos en la plaza responde a un decreto del obispo de Tenerife, Bernardo Álvarez, en el que se prohíben las procesiones. “Y sacar el Cristo a la plaza es una procesión”, apostilló, antes de referirse al efecto llamada de fieles que se podría dar. “Me gustaría destacar la comunicación fluida y las relaciones que existen con la Esclavitud”, señaló también el edil. 

Por su parte, el esclavo mayor del Cristo, Francisco José Doblas González de Aledo, detalló que el jueves se celebrará la ceremonia del Descendimiento (11:00 horas) en el interior del Santuario, mientras que a las 19:30 horas tendrá lugar la primera de las celebraciones eucarísticas que albergará el atrio. El 14 de septiembre, día del Cristo, se repetirá esa ubicación para las dos misas centrales, previstas tras el recibimiento al representante real y a las 19:30 horas.

Ante la posibilidad de que el aforo se complete, se instalará una pantalla gigante en la plaza –en el Espacio Cultural Estable en el que se vienen desarrollando los actos populares– para seguir las celebraciones vespertinas del 9 y 14 de septiembre. Mientras que el acceso al atrio será hasta completar el aforo, para la entrada al Espacio Cultural Estable se requerirá un ticket obtenido gratuitamente en la central de tickets www.mueveticket.com.


El atrio del Santuario suple a la plaza del Cristo en los principales actos religiosos

Queda descartada la opción en la que trabajaban el Ayuntamiento y la Esclavitud para ceremonias mayores ❖ Se instalará una pantalla gigante los días 9 y 14 de septiembre 

Domingo Ramos LA LAGUNA  EL DÍA I LA OPINIÓN DE TENERIFE Miércoles, 8 de septiembre de 2021 

Los principales actos religiosos de las Fiestas del Cristo de La La-guna se celebrarán finalmente en el atrio del Real Santuario -ese espacio abierto que antecede al templo- y no en la plaza, que era la primera opción en la que trabajaban el Ayuntamiento de La Laguna y la Esclavitud del Cristo. La decisión fue dada a conocer este martes durante la presentación del programa y cartel que ha confeccionado la conocida hermandad lagunera.

El concejal de Fiestas, Badel Albelo (PSOE), aseguró que la imposibilidad de desarrollar estos actos en la plaza responde a un decreto del obispo de Tenerife, Bernardo Álvarez, en el que se prohíben las procesiones. «Y sacar el Cristo a la plaza es una procesión», apostilló, antes de añadir el efecto llamada de devotos que se podría producir. «Me gustaría destacar la comunicación fluida y las relaciones que existen con la Esclavitud», afirmó.

El esclavo mayor del Cristo, Francisco José Doblas González de Aledo, detalló que el jueves se celebrará la ceremonia del Descendimiento (11:00 horas) en el interior del Santuario y que estará desprovista de besapié, mientras que a las 19:30 tendrá lugar la primera de las celebraciones eucarísticas que albergará el atrio. El 14 de septiembre, día del Cristo, se repetirá esa ubicación en las misas previstas tras el recibimiento al representante real -programado a las 10:45- y a las 19:30 horas. Cabe indicar que en esta edición representará al monarca el teniente general jefe del Mando de Canarias, Ceuta y Melilla, Carlos Palacios Zaforteza.

Ante la posibilidad de que el aforo se complete (oscilará entre las 150 y las 200 personas), se instalará una pantalla gigante en la plaza -en el Espacio de Programación Cultural Estable en el que se vienen desarrollando los actos populares- para seguir las celebraciones vespertinas del 9 y 14 de septiembre. Mientras que el acceso al atrio será hasta completar su capacidad, para la entrada al Espacio Cultural Estable se requerirá un ticket obtenido en www.mueveticket com. 

Cartel y programa

Tanto la obra anunciadora como la portada del libreto de actos están protagonizadas por el óleo que preside la Sala de Juntas de la Esclavitud, obra del abogado y exalcalde lagunero José Vicente de Buergo y Oráa. Con la edición de este cartel y programa independiente se interrumpe el acuerdo que la Esclavitud y el 
Ayuntamiento alcanzaron años atrás para unificarlos, lo que Albelo atribuyó a que, hasta tres semanas antes de las fiestas, no tenían aprobación para celebrar actos y que con esa doble vía buscaban darle más «protagonismo» a las citas religiosas. Añadió que en 2022 se reunirán para decidir si vuelven a la situación previa o siguen por separado.

En una rueda de prensa a la que también asistió el rector del Santuario -Víctor Manuel Álvarez-, el esclavo mayor hizo un recorrido por el programa y, entre otros aspectos, destacó la publicación de la carta del rey, un artículo en el marco del centenario de la promesa de los artilleros y un tri-buto al desaparecido orfebre Juan Ángel González, que codirigió la restauración del altar del Cristo. Doblas también se detuvo en que se ha decidido posponer por la pandemia un hermanamiento entre el Ejército y la Esclavitud con motivo de la referida efeméride, pero señaló que la previsión es realizarlo durante los próximos meses y que el Cristo salga en procesión a la plaza. 

Programación en el Santuario 

Descendimiento

El 9 de septiembre tendrá lugar la ceremonia del Descendimiento a partir de las 11:00 horas. 

Quinario

El denominado Quinario se desarrollará entre el 9 y el 13 de septiembre a partir de las 20:00 horas y en el interior del Real Santuario, a excepción del día 9, en el que la ceremonia religiosa está prevista a las 19:30 en el atrio del templo. Javier Salinas, obispo titular de Monterano y auxiliar de Valencia, será el encargado de presidir las celebraciones eucarísticas. 

Día grande

A las 10:45 será recibido el re-presentante real, una responsabilidad que en este caso recaerá en el teniente general jefe del Mando de Canarias, Carlos Palacios Zaforteza. A continuación habrá misa solemne en el atrio. A las 19:30, nueva celebración en el exterior del Santuario. 

Octavario

Se prolongará entre el 15 y el 21 de septiembre. Cada día dará comienzo a las 20:00 horas. 

Besos y fotos al Cristo lagunero 

El Santuario acoge la ceremonia del Descendimiento tras ser suspendida en las fiestas del pasado año ❖ La pandemia impide el tradicional besapié de la imagen.

Las Fiestas del Cristo de La Laguna dieron ayer un nuevo paso hacia la normalidad con el retomo del Descendimiento, uno de los actos más esperados por los devotos de la imagen. Las medidas de seguridad y las restricciones de aforo marcaron una ceremonia en la que la talla fue bajada desde su retablo y trasladada a su trono. Por la tarde tuvo lugar la primera de las misas en el atrio del Real Santuario. 

Domingo Ramos LA LAGUNA 

Una de las celebraciones más esperadas por los devotos del Cristo de La Laguna regresó ayer tras no poder desarrollarse el pasado año por las restricciones derivadas de la pandemia. El Descendimiento se convirtió de nuevo en foco de fe y tradición. Se trata de la ceremonia que tiene lugar en la mañana de cada 9 de septiembre y en la que esta imagen religiosa es bajada desde su retablo. Tradicionalmente le sigue un besapié que este jueves, por razones obvias, no pudo realizarse. Lo sustituyeron un beso del obispo en representación de los feligreses -«que este beso que yo le doy sea también el vuestro», dijo Bernardo Álvarez- y otros volados.

El acto se celebró con restricciones de aforo y medidas de seguridad. Para ello, Protección Civil custodiaba el acceso al Real Santuario desde los portales y una fila de conos tetrápodos marcaba el camino. Ya dentro, una persona en cada extremo de los bancos. Entre los participantes en la cita, y además del obispo, se encontraban el teniente general jefe del Mando de Canarias, Ceuta y Melilla, Carlos Palacios Zaforteza, y representantes del Ayuntamiento de La Laguna. 

El momento principal llegó en el tramo final de la celebración eucarística. Con la luz del templo atenuada, varios esclavos, provis-tos de unas telas, subieron por una escalera hasta el Cristo para proceder a su descendimiento hasta una mesa-altar. Todos los móviles apuntaron hacia el Crucificado Moreno, mientras que el repique de campanas y doce salvas sobre el cielo de la ciudad pusieron el acompañamiento sonoro. Lo normal en ese punto, y de no estar de por medio la covid, hubiese sido el besapié y, con posterioridad, la talla habría sido trasladada a puerta cerrada al trono en el que sale en procesión. En cambio, en esta ocasión fue llevada seguidamente hasta allí, lo que puso el punto final a la ceremonia. 

«Ha sido un día distinto porque, por segunda vez, tenemos que celebrar esto con las restricciones de aforo; pero, dentro de lo que cabe, ha sido el acto emotivo del Descendimiento», resaltó el esclavo mayor al término de la celebración. «Hay que destacar que hemos tenido la suerte de contar, además de con nuestro obispo, con la asistencia del de Monterano y auxiliar de Valencia, que nos ha acompañado, así como del teniente general, que es el representante del rey, y las autoridades municipales», continuó Francisco Doblas, que se mostró satisfecho con el acto: «Dentro de lo que cabe ha salido todo muy bien».

El máximo responsable de la Esclavitud del Cristo recordó que desde hace dos años no se descendía en septiembre. «No se hizo en 2020 porque, precisamente, no hubo celebraciones en la calle y el Cristo se quedó en su retablo», precisó, antes de añadir: «Por lo tanto, es la primera vez que, tras lo que ha ocurrido, en las fiestas está de nuevo en su trono. Y esta tarde es la primera ocasión en que va a salir a la puerta. Vamos dando pasitos...». Doblas se refería a la celebración vespertina en el atrio -esa plazoleta exterior que precede al templo- y con la que se dio inicio al denominado Quinario.

Es cierto que la talla fue bajada durante la pasada edición de la Semana Santa. «En aquella ocasión lo dejamos arriba, no lo trajimos hasta aquí», comentó señalando al trono ubicado junto a la puerta de la iglesia. «Está acercándose a ver si llegamos...», agregó sobre el deseo de que finalmente se alcance la ansiada normalidad y pueda procesionar otra vez. Además, hizo un llamamiento para aprovechar estos días para visitar al Cristo y para acudir a las celebraciones en el atrio (una ayer y otras dos el 14 de septiembre), «que tiene un aforo de casi 200 personas».

Badel Albelo, 'líder' municipal

El concejal de Fiestas, Badel Albelo (PSOE), encabezó la representación consistorial dada la baja por paternidad del alcalde, Luis Yeray Gutiérrez, y en ausencia del regidor local accidental, Rubens Ascanio (Unidas). «Hoy es un día importantísimo porque el Descendimiento es el comienzo de las fiestas para los creyentes y para los no creyentes, porque, como siempre he dicho, la imagen del Cristo de La Laguna trasciende a los feligreses», expresó Albelo. «Es emotiva porque no se trata solo de religión, sino de una talla que significa mucho para todos los laguneros», manifestó el edil sobre la ceremonia, en la que indicó que ya había estado en anteriores ediciones acompañando a su madre, devota de la imagen.

Como en cada ocasión en la que se desciende al Cristo (tanto en septiembre como en Semana Santa), varios nuevos esclavos tomaron posesión de sus medallas. Concretamente, fueron tres las incorporaciones a la conocida hermandad durante un acto en el que también adquirieron prota-gonismo algunas de las manifestaciones del obispo en una homilía que armó en torno a la dicotomía entre el bien y el mal.

El obispo y la maldad humana

Álvarez estableció un contraste entre los fenómenos naturales y los comportamientos humanos. «A veces hay tormentas, terremotos, pandemias como esta que tenemos ahora..., pero todo eso es insignificante respecto a la maldad que producimos los seres humanos, porque nuestro corazón está envenenado por el mal. El egoísmo, las guerras, los enfrentamientos, las divisiones, las luchas y los conflictos que hay entre las personas, en el ámbito incluso de la propia familia. 6.800 separaciones familiares el año pasado en Canarias. ¿Por qué? Porque cada uno quiere hacer lo que le da la gana», sostuvo. Asimismo, optó por «renunciar al propio capricho, deseo, impulso..., para, usando la cabecita, hacer el bien que tenemos que hacer».

También llevó su reflexión hacia el terreno de la religiosidad popular y de la importancia de los comportamientos particulares. «El culto a Dios hay que manifestarlo en la vida», afirmó. «A los templos, a las celebraciones de la fe venimos a recibir nutrientes que necesitamos para vivir haciendo el bien. El culto a Dios no es solamente rezar y cantar o sacar una procesión, o adornar las imágenes con todo el esplendor y la belleza que nosotros queramos», señaló, antes de agregar: «Eso luego se tiene que proyectar en la vida de cada uno».

El prelado lamentó las incoherencias que en ocasiones se producen en ese ámbito. «Mucho viva la Virgen, mucho viva Cristo, mucho..., pero luego cada uno hace lo que le apetece, lo que le da la gana, enfrentados y divididos unos con los otros, egoístas y que nos importa un pepino el sufrimiento y el daño que puedan tener los demás», dijo, antes de invitar a «pensar, sentir y actuar como Cristo». Bernardo Álvarez profundizó en la misma reflexión. «Cuando te hacen algo, se meten contigo, te critican o lo que sea..., ¿qué es lo que nos brota enseguida? El espíritu del mal dice a este se la cobro, véngate de él, habla mal de esa persona, machácalo... Eso es lo que nos sale de dentro, porque el espíritu del mal siempre acentúa nuestras pasiones, nuestra malignidad y entonces pensamos que eso es lo que hay que hacer», observó. «¿Pero Jesús qué piensa al respecto? Ahí están sus palabras y manera de actuar: no devuelvas mal por mal; rezad por los que os calumnian, os persiguen y os hacen daño; no seáis vengativos... Él mismo, desde la cruz, dijo a los que lo estaban crucificando: Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen'». 

El Cristo completa su renovación

Las obras en los edificios anexos al Santuario y el atrio concluyen y dejan restaurado el patrimonio del recinto 

El Día Domingo Ramos LA LAGUNA 14.09.2021

El entorno del Santuario del Cristo de La Laguna acoge hoy el día grande de la ciudad con las obras de sus edificios y de su atrio culminadas, lo que supone el cierre de un círculo que comenzó una década atrás y que deja los principales atributos patrimoniales del lugar en estado de revista. La Esclavitud del Cristo, gracias a la financiación del Gobierno de Canarias, ha logrado que la actuación sea una realidad en algo menos de dos años y pese a los contratiempos derivados de la covid. «Hemos ganado en espacio, en tranquilidad y en seguridad», celebran desde la conocida hermandad.

«La obra está terminada y lo que falta ahora es reamueblar, pequeños retoques, limpieza...; estamos en ese proceso", explica Domingo Ferrera Martín, que desempeña en la Junta de Gobierno de la Esclavitud el cargo de mayordomo, durante un recorrido por las instalaciones. Ya desde el exterior, con las paredes de los edificios saneadas y pintadas - en tonos pastel amarillo, marrón y azul-, se percibe la mejora. Al otro lado, la reja junto a las instalaciones militares ha desaparecido.  Por su parte, y ya dentro de las dependencias, se observan unos acabados cuidados.

Concretamente, las labores comenzaron en octubre de 2019 y estaban dirigidas a la mejora del conjunto histórico de los edificios anexos al templo, esto es, la denominada Casa de la Esclavitud, que es la construcción más próxima a la plaza del Cristo, y el Rectorado, que linda con el Santuario. En paralelo, también se previó actuar en la plazoleta situada entre los portales y la iglesia. La cofradía apunta que una de las líneas maestras para la obra fue la de evitar en los inmuebles los tabiques superfluos incorporados en la época en que residieron allí diez frailes franciscanos, logrando de esa manera espacios más diáfanos.

Todo ello se realiza sobre un espacio de honda historia. Y es que el antiguo convento franciscano -el primero de Tenerife- fue mandado a construir en 1506 por el adelantado Alonso Fernández de Lugo. Lo terminaron en 1580, a lo que le siguieron sucesivas ampliaciones. Una fecha clave es el 28 de julio de 1810, cuando sucumbió a un incendió del que solo se salvaron la espadaña, la Casa de la Esclavitud y la imagen del Cristo. A partir de ahí comenzó un nuevo camino hasta la actualidad.

Un buen ejemplo de las mejo-ras que ahora se han acometido es la sala de juntas de gobierno ubicada en la Casa de la Esclavitud. Hay maderas trabajadas, una mesa alargada, sillas en tonos azules y blancos, la posibilidad de iluminar con luz natural y un cuadro del Santísimo Cristo de La Laguna que preside la estancia. El suelo de hormigón que tenía fue demolido y renovado en madera. «Se han recuperado y saneado las carpinterías antiguas, la escalera, los pisos...», completa el mayordomo. Y amplía: «Aquí dentro ha habido una reforma integral. Se han rehabilitado las techumbres y artesonados de madera de tea de todos los edificios anexos al Santuario. Se han levantado, saneado e impermeabilizado los techos, y se han instalado unas placas aislantes térmicas».

La Casa de la Esclavitud está integrada por la referida sala de jun-tas, una zona de despachos, un hall de entrada y un aseo, mientras que en la parte baja se encuentran la tienda y un museo que abrirá sus puertas próximamente. «Se ha equipado todo con sistema de seguridad, antincendios, alarmas y electricidad», detalla. Por su parte, el otro inmueble, el Rectorado -que recibe su nombre porque allí se ubica la casa del rector y que formaba parte de la antigua zona conventual-, cuenta en la parte baja con el salón noble de la Esclavitud y con un pequeño depósito para guardar los enseres de esta hermandad. 

Fondos regionales y propios

El Gobierno de Canarias aportó 1,8 millones de euros, mientras que el resto de los fondos necesarios para las obras corrieron a cargo de la Esclavitud. Señalan desde la cofradía que, inicialmente, tenían consignada una partida del Cabildo de Tenerife, pero que el ingreso no se materializó. «No pudimos hacer el proyecto de la plaza-atrio con la iluminación monumental, el pavimento de piedra molinera, una fuente nueva, el ajardinado...», puntualizan, antes de indicar que tuvieron que reajustar el presupuesto para que al menos se pudiese reurbanizar parcialmente la citada plazoleta. Tras las modificaciones ejecutaron una intervención para eliminar las barreras arquitectónicas y dejar el adoquinado a nivel. «Es lo que más han agradecido los fieles», expresan.

«Está ahora la plaza-atrio como se concibió en 1810», exponen tras la eliminación de la reja que bordeaba el jardín militar. «Hemos plantado césped, unos geranios y lo que hemos podido, y hemos adecentado la fachada del cuartel», comentan sobre un espacio que utilizan merced a una concesión que consiguieron del Ministerio de Defensa. 

Los trabajos descritos van más allá de la obra en sí. Suponen concluir el más ambicioso plan de dejar renovado el Santuario y su entorno. Domingo Ferrera se sabe el proceso de memoria. Es la consecuencia de haber vivido en primera persona, como titular de la Mayordomía, todos los hitos que se han producido en este tiempo. El primero de esos pasos fue la restauración del Cristo de La Laguna, en 2011; en 2016 comenzó la rehabilitación del Santuario; le siguió la restauración del altar-tabernáculo del Crucificado Moreno, y lo último ha sido esta actuación sobre la Casa de la Esclavitud, el Rectorado y la plaza.

«Ahora tenemos una seguridad con la que antes no contábamos. Estamos adaptados a la normativa de seguridad, tenemos sistema contraincendios y hemos equipado todas las instalaciones con un dispositivo de alarmas de alta seguridad», manifiesta Ferrera, que ha estado vigilante de que la obra se ejecutase de la mejor manera posible durante los últimos casi dos años. Su experiencia en el Santuario del Cristo le permite conocer hasta los más pequeños detalles del recinto y ha ido alertando a la empresa constructora de posibles problemas antes de que estos se produjesen.

Asimismo, había una Comisión de Obra que, además de por el mayordomo, también estaba integrada por el esclavo mayor, Francisco José Doblas González de Aledo; el ex esclavo mayor Emilio La Roche; Javier Plasencia, un miembro de la Junta de Gobierno de profesión aparejador, y el esclavo Cristóbal Trujillo. «Cada semana teníamos una visita a la obra», explica Ferrera. Cabe indicar que los trabajos que ahora se pueden ver en la zona corresponden a la construcción del velatorio, que es un proyecto aparte.

Trabajos necesarios

«Estoy contentísimo», expresa el mayordomo cuando se le pregunta por el balance final, y añade que eran unos trabajos que eran necesarios «desde hacía muchísimo tiempo». No en vano, apunta que el actual esclavo mayor, cuando todavía era teniente esclavo -el número dos en el organigrama de la Esclavitud- en otra junta de gobierno, le dijo al máximo responsable de la época, Jorge Melón, que iba a intentar dar los primeros pasos para el proyecto. «Tenemos un pequeño museo, unos depósitos donde podemos guardar todos los enseres y contamos con edificio para años», destaca. Doblas expresa que han sido dos años en los que desde la hermandad se han dejado en esta iniciativa «el tiempo y el esfuerzo», y muestra «el agradecimiento infinito a Fernando Clavijo, con el que la Esclavitud tendrá una deuda histórica» por haber apostado por la intervención. También resalta la labor de la directora general de Patrimonio Histórico del Gobierno de Canarias, Nona Perera, y del anterior director, Miguel Ángel Clavijo. Además, el esclavo mayor expresa su «reconocimiento personal y especial» al mayordomo, que lleva toda la vida vinculado a esta cofradía de La Laguna y realizando trabajos alejados de los focos. En concreto, Francisco Doblas subraya la «dedicación exclusiva» de Ferrera en los últimos dos años al seguimiento de estas obras que han contribuido a que los alrededores del Santuario puedan mostrar en la actualidad su mejor versión. 


La Laguna celebrará hoy su día grande sin las tradicionales procesiones.

En su lugar habrá varias citas religiosas y fuegos artificiales. Los actos darán comienzo a las 10:30 horas con el recibimiento al representante real, una responsabilidad que en esta ocasión recaerá en el teniente general jefe del Mando de Canarias, Ceuta y Melilla, Carlos Palacios Zaforteza. El esclavo mayor, Francisco José Doblas González de Aledo, le hará entrega del bastón de plata de la Esclavitud. Después dará comienzo, en el atrio del Real Santuario, una celebración eucarística presidida por el obispo de Tenerife, Bernardo Álvarez, y con homilía a cargo de Javier Salinas, prelado titular de Monterano y auxiliar de Valencia. Cantará la misa el coro del Orfeón La Paz de La Laguna, dirigido por Juan Felipe Rodríguez. Ya a las 19:30 horas tendrá lugar otra eucaristía en la misma plazoleta, en este caso a cargo de Víctor Manuel Álvarez, vicario general de la Diócesis de La Laguna y rector del Santuario. Ahí se ocupará del acompañamiento musical la Agrupación Musical Achamán, Jóvenes Sabandeños, bajo la dirección de Héctor González. Estaba prevista a las 21:30 horas una Noche de Orquestas cuya celebración finalmente se pospone al 24 de septiembre. A las 23:30 horas comenzará la exhibición pirotécnica desde la Montaña de San Roque. 

Los fuegos de las Fiestas del Cristo vuelven con 'silenciador' 

La Laguna celebra su día grande con los actos religiosos y la exhibición pirotécnica 

Domingo Ramos LA LAGUNA 15.09.2021

El cielo de Aguere se volvió a iluminar anoche, después de que la pandemia lo impidiese en 2020, con la exhibición pirotécnica que cada año cierra el 14 de septiembre, el día del Cristo. El Crucificado Moreno salió a los portales de su Santuario y a las 23:30 horas comenzó el espectáculo pirotécnico. La exhibición, que continuaba al cierre de esta edición, llenó de colorido la parte alta de San Roque y durante ocho minutos -de más de 40- estaba previsto que tuviese silenciador. Los espectadores se situaron en calles del casco, en azoteas e, incluso, en otras zonas más hacia las afueras de la ciudad.

El alcalde de La Laguna, Luis Yeray Gutiérrez (PSOE), mostró su satisfacción con el transcurso de la jornada. «Ha sido una alegría inmensa poder estar nuevamente compartiendo con los vecinos del municipio y también con quienes nos visitan para esta festividad», manifestó. «Hoy es un día muy especial para los laguneros, sobre todo para aquellos que somos devotos, porque creemos realmente que la ayuda del Santísimo Cristo de La Laguna hace posible que podamos ya ver el futuro con bastante entusiasmo, y eso para nosotros es muy importante», señaló el regidor local. 

El Ayuntamiento lagunero había anunciado como principal novedad del espectáculo de fuegos artificiales que este tendría hasta un 60% menos de contaminación acústica. Finalmente, de los diez minutos en los que intervino cada pirotecnia (Hermanos Toste, Estadella, Gironina y San Miguel), se preveía que dos fueran de baja intensidad sonora, mientras que los ocho restantes tendrían la fuerza acostumbrada. El portavoz de Unidas se Puede, Rubens Ascanio, situó ayer lo anterior como un logro. «La Laguna recupera esta noche los fuegos del Cristo, pero, como pudimos comprobar anoche, son un 40% más silenciosos», expresó en las redes sociales sobre la exhibición del 13 de septiembre. Y prosiguió: «En el pasado mandato, nuestra compañera María José Roca defendió en el pleno una moción a favor de este tipo de fuegos. Ahora se demuestra que es posible tener un Ayuntamiento con sensibilidad con las mascotas y las personas que sufren ante los sonidos fuertes».

Los fuegos artificiales concluyeron la jornada grande de Aguere. Esta, aunque desprovista de sus procesiones por las restricciones derivadas de la covid, sí contó con algunos actos religiosos. El principal se desarrolló a partir de las 10:30 horas en las inmediacio-nes del Santuario, donde fue recibido el representante real, una responsabilidad que en esta ocasión recayó en el teniente general jefe del Mando de Canarias, Ceuta y Melilla, Carlos Palacios Zaforteza. Allí se dieron cita autoridades como el subdelegado del Gobierno en la provincia de Santa Cruz de Tenerife, Javier Plata; el presidente del Parlamento de Canarias, Gustavo Matos; la consejera insular Berta Pérez, y el alcalde de La Laguna, el también socialista Luis Yeray Gutiérrez.

La gente se acumulaba en la calle del Agua junto a unas vallas recubiertas con unas telas rojas. Llegó el obispo de Tenerife, Bernardo Álvarez. «¡Formado el piquete de honores sin novedad!», dijo uno de los militares a un superior. Ya estaba todo preparado para el recibimiento del representante real, pero, tratándose de un acto de este tipo, no podía faltar alguno de esos momentos rocambolescos que siempre se producen. Una señora descontenta con cómo estaba organizado aquello no dudó en hacer partícipe a todo el que tenía alrededor de su malestar: «¡Esto es un desastre!». Poco después entró en escena un hombre en una bicicleta, con un peto amarillo y una GoPro sobre el casco, y que pareció por un momento que iba a adentrarse en la zona acotada. La policía lo miró de arriba a abajo. Falsa alarma: acabó dándose la vuelta y se fue.

Recibimiento y eucaristía

El esclavo mayor, Francisco José Doblas González de Aledo, y el alcalde lagunero recibieron al representante real, que llegó en un vehículo escoltado por dos motoristas de la Policía Local. Fue la antesala de la celebración eucarística, que presidió el obispo de Tenerife y con homilía de Javier Salinas, prelado titular de Monterano y auxiliar de Valencia. Álvarez recordó al comienzo de la ceremonia que se está cumpliendo el centenario de la participación de la Batería de Montaña del Regimiento de Artillería de Tenerife en la Guerra de África -«fue una guerra de pacificación de una situación en la que vivía el protectorado de Marruecos», expresó-, tras la que sus integrantes llegaron sanos y salvos, lo que atribuyeron a haberse encomendado al Cristo.

«Agradezco de corazón poder participar en esta fiesta vuestra», afirmó el obispo invitado, que dijo haberse sentido «impresionado» el día del Descendimiento, la ceremonia en la que el Crucificado Moreno es bajado desde su altar-tabernáculo para trasladarlo a su trono. La intervención de Salinas giró en torno a la fe, la cruz..., pero también dejó alguna frase llamativa. «Los cristianos no somos nunca una secta, sino un signo de esperanza para el mundo; somos gente de puertas abiertas, de contacto, de diálogo, de escucha...», sostuvo el prelado, aunque admitió: «No quiere decir eso que siempre lo hagamos bien».

Al término del acto religioso (hubo otro durante la tarde, también en el atrio), el concejal de Fiestas, Badel Albelo, consideró que todo salió «muy bien». «Fruto del trabajo conjunto entre la Esclavitud y el Ayuntamiento, hemos conseguido celebrar un acto a la altura de las condiciones y en tiempos de pandemia», afirmó. «Ha habido una representación real ostentada en el teniente general, también hemos tenido a las autoridades militares y es un acto esperado por todos», destacó el edil, que mostró su esperanza en que el próximo año se puede lle-var a cabo la jornada «con total normalidad».

El líder de Coalición Canaria (CC) en La Laguna, Jonathan Domínguez, resaltó que el 14 de septiembre para el municipio «no es un día más, sino el día de La Laguna». Y apuntó: «La imagen del Santísimo Cristo significa mucho para los laguneros y los canarios en general, y para mi personalmente, también, que soy miembro de la Esclavitud, y estar presente en los pocos actos de hoy ha sido un honor». El nacionalista completó: «Ojalá el próximo año las condiciones sanitarias mejoren y podamos recuperar los actos como tradicionalmente los vivíamos».